Introducción:
La evaluación del olor de las heridas nos aporta información del estado de la lesión. El mal olor suele ser un signo de alarma de infección, hemorragia o de necrosis de la lesión.
En ocasiones el mal olor puede estar asociado a la respuesta de algunos apósitos al ser aplicados sobre las heridas como los hidrocoloides, colágeno o alginatos.
El abordaje principal se centra en tratar la causa desencadenante.
Los pacientes que sufren heridas con mal olor se enfrentan a importantes problemas relacionados con el impacto sobre la autoimagen corporal y sus relaciones sociales.
Recomendaciones:
- Considerar el mal olor al planificar la frecuencia de cada cuidado y en la elección de los productos.
- En heridas tumorales, una óptima gestión del exudado conlleva un mejor control del olor.
- Atender las medidas ambientales como la ventilación del ambiente o la utilización de ambientadores o productos balsámicos como el café o la canela en polvo por su capacidad para neutralizar el olor ambiental.
(Tabla 3. Resumen de los niveles de recomendación en caso de olor según la evidencia disponible)
Carbón activado
Qué es:
Apósitos que a su composición interna contienen carbón activado.
Para qué sirve:
Están indicados en aquellas lesiones que desprenden mal olor, infectadas o neoplásicas. Actúan como filtro y absorben el mal olor de las heridas mejorando el confort.
Cómo se utiliza:
Previa limpieza de la herida, se aplica directamente sobre la herida. Estos apósitos no se pueden recortar, ya que el carbón (interior) no puede entrar en contacto directo con la herida. La mayoría precisan de un apósito secundario para ser fijados. Se debe retirar el apósito de forma atraumática. Los cambios de apósito se realizan en función del nivel de exudado de la lesión (saturación del apósito), pueden estar hasta 7 días en contacto con la lesión.
Contraindicaciones:
No debe ser aplicado en pacientes con hipersensibilidad o al alergias a algunos de sus componentes.
Observaciones:
Los apósitos de carbón se mantienen activos mientras perduran secos. En el mercado podemos encontrar apósitos compuestos de forma específica de carbón activado o combinados con plata.
Nombres comerciales:
Apósitos con carbón
Askina® Carbosorb B. Braun
Carboflex® Convatec
Carbonet® Smith & Nephew
Apósitos de carbón y plata
Mepilex Ag® Mölnlycke
Actisorb® Plus 25 Systagenix
Vliwaktiv® Ag Farmaban
Metronidazole
Qué es:
Agente antibacteriano y Antiprotozoario.
Para qué sirve:
Para el tratamiento de aquellas infecciones que ocasionan mal olor eliminando las bacterias. Es activo hacia la mayoría de bacterias anaerobias. Ha demostrado su eficacia en la reducción de los daños y el olor en las heridas colonizadas por bacterias anaerobias. No es efectivo sobre los aerobios comunes.
Cómo se utiliza:
Previa limpieza de la herida, se aplica directamente cubriendo la totalidad del lecho de la herida. Precisa de un apósito secundario. Aplicación diaria (1 o 2 aplicaciones).
Contraindicaciones:
Hipersensibilidad al metronidazol, parabenos u otros ingredientes de la formulación. Evitar el contacto con los ojos. No utilizar durante el embarazo ni en niños.
Observaciones:
Debido a la mínima absorción del metronidazol y por tanto, a la insignificante concentración plasmática con la administración tópica del fármaco, las reacciones adversas que se manifiestan con su administración oral no aparecen en la aplicación cutánea. Se pueden preparar fórmulas magistrales con diferentes concentraciones de metronidazol.
Nombres comerciales:
Metronidazol® 0,75% Viñas
Rozex gel® 0,75% Galderma
Fórmules magistrals